La Audiencia Provincial de Alicante ha confirmado una sentencia que prohíbe a los propietarios de un piso usarlo durante tres años por permitir que se ejerciera la prostitución en él con las consiguientes molestias para el resto de vecinos, según se recoge en el fallo, al que ha tenido acceso EFE.
La resolución ahora confirmada, que fue dictada en diciembre pasado por el juzgado de Primera Instancia número 4 de Alicante, declaró probado que los dueños de la vivienda «no adoptaron ninguna medida tendente a subsanar los problemas de convivencia que estaban generando sus inquilinos».